12 de ene. 2021
Escrito por Carola Rebolledo S.
El 2020 quedará en la memoria del mundo entero como un año diferente, las oficinas se vaciaron y en su remplazo los livings se transformaron en salas de juntas, los equipos de trabajo aprendieron que aun en la distancia siguen siendo eficientes y por supuesto los niños ganaron un tiempo valioso con sus padres, a causa de la pandemia y el confinamiento. Pero el año está por acabar y con ello se asoman en el horizonte los balances, diagnósticos y también el cierre de actividades.
Es en este contexto, de cierres, que HIPPY completó las 30 semanas de actividades preparadas para el trabajo con niñas, niños y sus padres o tutores. En total 550 familias participaron del programa este 2020, cuyo objetivo es fomentar la educación temprana de los menores, siendo los padres sus primeros educadores.
Para Ana María Fierro madre de Christopher González de la comuna de Concepción, el programa ha significado un gran apoyo en el proceso de aprendizaje, además sostuvo que “es reconfortante el apoyo que las tutoras nos entregan. No solo nos dan las herramientas para ayudar y enseñarle a nuestros niños, sino que tienen la paciencia increíble de llamarnos y aclarar las dudas”.
A pesar del confinamiento que permanece en gran parte de las comunas participantes del programa, los equipos HIPPY quisieron realizar ceremonias de graduación simbólicas a modo de cierre. De esta manera las tutoras se desplazaron hasta el domicilio de las niñas y niños para entregarles un reconocimiento, por completar las semanas curriculares del programa.
Yajaira Osorio es tutora del programa HIPPY en la comuna de Santiago y participó de la graduación de algunos de sus alumnos, al respecto señaló “este año fue un gran desafío, atreves de la pandemia pudimos llevar nuestra labor y enseñanza a cada hogar y familia… El desarrollar los aprendizajes, para que las madres pudieran ser maestras de sus hijos en casa, a pesar de que no habían actividades escolares, pero se logró… HIPPY llegó a cada niña y niño”.
Joselyn Huenchul, es de la comuna de Lumaco y tiene dos niños participantes de HIPPY. Uno de sus hijos se graduó y su mamá al respecto comentó “Agradezco al programa por todo este tiempo. Para mis hijos ha sido una manera muy entretenida de aprender, el juego y las actividades les han ayudado a desarrollar sus habilidades “.
Kelly Chávez madre de Mía Vergara de la comuna de Concepción, destacó la invitación que desde el jardín de su hija le hicieron para participar de HIPPY, agregando que “este programa ha sido muy beneficioso para nosotros como familia y también para Mía. La evolución de ella, es súper notoria y rápida. Aprender con materiales entretenidos ha sido lo más beneficioso”.
Junto con el cierre de año, el programa HIPPY realiza balances, evaluaciones y cuentas públicas, en estas últimas las autoridades locales quisieron agradecer el trabajo realizado y reafirmar su compromiso con el programa.
Fernando Peña, Seremi de Educación del Biobío comentó “en año tan especial y distinto producto de la pandemia, hemos encontrado una manera de adaptar esta iniciativa a la realidad del año 2020 con todos los límites y obstáculos que esto supuso, pero que en ningún caso fueron impedimento para realizar el trabajo al interior de las casas, colaborando y apoyando a las familias o tutores legales, para que finalmente los niños y niñas de nuestra región pudieran seguir aprendiendo y trabajando desde sus hogares”.
Felipe Alessandri, Alcalde de Santiago, fue invitado a una de las ceremonias de graduación en el Parque Almagro y se mostró agradecido con la labor que las tutoras y colaboradores realizaron durante el año, además comentó “este ha sido un año muy complejo, que si por algo nos levantamos cada día es por los niños, por las nuevas generaciones, por los nuevos chilenos. Solo queda agradecer ya que trabajar por ellos, los niños, que sin este tipo de programas no sería posible. Muchas gracias a ustedes los colaboradores”.
Gonzalo Araneda, Director Ejecutivo Servicio Local de Educación Pública Andalién Sur, comentó “estamos muy contentos porque sabemos que HIPPY contribuye en el aprendizaje de nuestras niñas y niños, especialmente este año, en que las cosas no han sido fáciles. Nosotros tenemos una convicción absoluta de que los padres son fundamentales en el proceso de formación y educación de los hijos. El poder convertir el hogar en un espacio de aprendizaje constructivo mediante el juego, que les ayuda a adaptarse a las primeras experiencias escolares, para nosotros es un gran logro”.
Por su parte Guillermo Turner, Gerente de Asuntos Corporativos de CMPC destacó que “a veces hay muchas críticas hacia las empresas grandes, pero las empresas grandes como CMPC también son necesarias porque pueden hacer grandes cosas y eso es justamente lo que queremos, en este caso apoyar en donde más se necesita, en los niños y su educación temprana. Así que mientras lo podamos hacer, contando con buenos aliados lo seguiremos haciendo, muchas gracias al equipo que son la parte central del programa”.
Es importante mencionar que la implementación del programa HIPPY, partió hace tres años con un piloto de 37 familias en la Región Metropolitana y hoy abarca cerca de 550 familias de 11 comunas en tres regiones del país.
Carolina Andueza, Directora Ejecutiva en Fundación CMPC se manifestó contenta con el trabajo realizado durante el año y agregó que “lo que queremos es empoderarnos, casi como una misión de vida, ser los primeros y más importantes educadores de nuestros niños. Entonces imaginen este año con un programa de visitas domiciliarias, algo impensado en pandemia, necesariamente debimos adaptarnos… utilizar todas las herramientas virtuales, las tutoras se capacitaron, los cuadernillos con las mamás se transformaron en video llamadas y eso es emocionante, porque significa que HIPPY funciona”.
El programa educativo HIPPY consiste en un plan con 5 actividades semanales, especialmente diseñado para entregar las herramientas y materiales que apoyan la educación de niñas y niños, aplicada por sus padres o tutores legales.